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24 Ene Descubriendo el Sagrado Lugar del Café Colombiano en Antioquia
El café es más que una bebida; es una experiencia que despierta los sentidos y transporta a los amantes de esta deliciosa infusión a un mundo de aromas y sabores inigualables. Desde los suaves granos arábicos hasta los intensos robustas, la variedad de café ofrece un amplio espectro de opciones que ha despertado una creciente curiosidad en los paladares más exigentes.
Cuando se menciona café, es inevitable no pensar en Colombia, país reconocido mundialmente por su exitosa producción, siendo el tercer mayor productor a nivel global, después de Brasil y Vietnam. Entre las destacadas regiones cafetaleras de Colombia, Antioquia se alza como un verdadero santuario del café.
Antioquia, una región de climas templados y montañas majestuosas, propicia el cultivo de granos de alta calidad a lo largo de todo el año. Aquí, los caficultores, en su mayoría pequeños productores, son auténticos conocedores de la materia. ¿Cuál es su secreto? Cultivan a gran altitud y bajo temperaturas moderadas para lograr una producción de granos de variedad arábiga, resultando en un café con fragancia dulce y equilibrio excepcional.
¿Cómo es tomar un café de Antioquia?
Sumergirse en la experiencia del café antioqueño implica disfrutar de granos cultivados en fincas locales. Para aquellos que buscan una experiencia auténtica, el “tinto” (café negro largo) endulzado es la elección común, a menudo disponible en las esquinas, conservado en dispensadores que mantienen su temperatura ideal.
Para los amantes del café que buscan una experiencia más completa, las famosas tiendas de café de especialidad son paradas obligatorias. Aquí, expertos baristas tratan los granos con maestría, ofreciendo preparaciones exquisitas que permiten saborear uno de los mejores cafés del mundo.
Aunque te encuentres en otro país, no te desanimes. La calidad del café antioqueño destinado a la exportación cumple con rigurosas normativas. En tu taza, descubrirás la fragancia dulce y frutal de los fértiles valles de Antioquia, con sutiles notas de panela y mora, cuerpo delicado y una acidez cítrica moderadamente alta.