31 Dic Tips para deshidratar el tomate
Deshidratar tomates es una excelente manera de conservarlos y agregar un toque especial a tus recetas.
Para comenzar, es importante seleccionar los tomates adecuados; los Roma o Cherry son ideales, siempre que estén maduros pero firmes. Asegurate de lavarlos bien antes de proceder.
Una vez limpios, cortá los tomates en rodajas finas o en mitades, y si lo preferís, podés quitar las semillas. Para darle un extra de sabor, considerá añadir un toque de sal o hierbas.
El siguiente paso es la deshidratación. Colocá las rodajas en una bandeja y ponelas en el horno a una temperatura de entre 60-70°C. Mantené la puerta del horno entreabierta y dejá que los tomates se deshidraten durante 6 a 12 horas. Si preferís, también podés optar por una temperatura más baja, entre 55-60°C, durante 8 a 12 horas.
Una vez deshidratados, es fundamental almacenar los tomates correctamente. Guardalos en frascos herméticos y colocalos en un lugar fresco y oscuro para que se conserven por más tiempo.
Con estos sencillos pasos, vas a poder disfrutar de deliciosos tomates deshidratados en cualquier momento. ¡Animate a incorporarlos en tus platos favoritos!
